Algo me decía, que iba a ser mamá. ¡Ahora se que eres realidad!
Tu corazón suena a campanadas que dicen que estás bien, y que dentro de poco verás la luz del sol, a mamá, a papá, a tus hermanos, a las flores, a los animales y a todas las maravillas de este mundo.
Tu crecimiento no se nota todavía en mi cuerpo, pero cambiará mi figura para formar una burbuja donde estarás tibio, alimentado, feliz… hasta que llegue el momento de salir y estar con nosotros… Y poder abrazarte por primera vez.
Cuando toco esa burbuja, sueño con tus ojitos vivaces, tu pelo, tus pies y tus manitas de príncipe o princesa.
Sueño con tus ojitos que buscarán mi cara y se que me encantará verme reflejada en ellos, tratando de saber lo que sientes o piensas.
Imagino cómo será tu carita, o tus labios rojos manzana o rosados como el corazón de las sandías.
Y yo sueño…
Sueño con saber cómo serán tus piernitas, verte dar tus primeros pasos, y venir hacia mí, tratando de mantener el equilibrio.
¿Cómo serán tus manitas? suaves, chiquitas, cálidas… que volarán como mariposas hacia mi cara para cubrirme del más deseado abrazo cada vez que te vea.
Sueño con escuchar tu vocecita, diciendo tus primeros barullos disfrazados de palabras, tus intentos de hacerte entender, escucharte decir mamá, y ese día se me caerán las babas.
Sueño con verte correr gritando de alegría porque atrapaste a una inocente hormiga que se cruzó por tu camino. O tu emoción inmensa por regalarme una piedra de color brillante.
Sueño con verte dominar, no sin darte algunos golpes, la bicicleta, verte jugar a ser mamá y papá, verte jugar a la pelota ¡y a tantas cosas más!
Falta poco para conocerte, porque cuando ya no haga frío, cuando las flores estén llenando el aire con su olor, sus colores, cuando el sol nos ilumine con toda su fuerza, saldrás de la burbuja y romperás el silencio con tu llanto para recordarme lo humano que eres, y yo seré la mujer más feliz del universo esa primavera.
No podré darte las soluciones a todos tus problemas, ni respuestas a tus dudas o temores, pero te aseguro que puedo escucharte atenta y podremos buscarlas juntos.
No podré evitar que tropieces, pero te daré la mano para que te agarres y no caigas, no importa la edad que tengas.
Disfrutaré con tus triunfos, tus éxitos, tus alegrías. No juzgaré tus decisiones, me limitaré a apoyarte, y a ayudarte si me lo pides. Siempre estaré para ti. Mi amor es incondicional.
No podré impedir que te alejes de mí, pero si desearte lo mejor (siempre, siempre) y esperar que vuelvas cuando lo creas necesario. Respetaré el espacio que necesites para crecer.
No podré evitar tus sufrimientos pero podré llorar contigo y ayudarte a empezar de nuevo.
Te siento aquí, conmigo… y siento paz y alegría.
De mí no heredarás cosas materiales, ni riquezas, ni joyas, nada de eso. Heredarás el amor que siento por tu padre y por la familia, el respeto que siento por las demás personas, piensen lo que piensen. Aprenderás que la vida no es fácil, pero aún así merece la pena vivirla.
Aprenderás que si fracasas no es culpa ni responsabilidad de otros y que lo importante es aprender de tus propios errores.
Aprenderás que, antes de salvar el planeta para la próxima generación, queriendo remediar los errores de la generación de tus padres, deberás empezar por ti mismo, y lo primero será intentar limpiar tu propia habitación.
Aprenderás con el tiempo, que los amigos verdaderos valen mucho más que cualquier cantidad de dinero y entenderás que esos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Aprenderás que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es solo de almas grandes.
Aprenderás con el tiempo a luchar contra las injusticias, que lo que logres en tu vida que sea el fruto de tu esfuerzo, y a valorar lo que tienes.
Aprenderás que el que humilla o desprecia a un ser humano, tarde o temprano sufrirá las mismas humillaciones o desprecios multiplicados.
Aprenderás con el tiempo, que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen, ocasionará que al final no sean como esperabas.
Aprenderás con el tiempo, que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante. Hay que disfrutar del presente. Es el verdadero regalo.
Falta tan poco para verte que la ansiedad me invade. Y ya estoy deseando verte crecer y disfrutar de tus primeras veces.
Nos vemos pronto hijo, te estoy esperando.
Papi también te espera y va a ser muy buen papá, porque ya te cuida (y me cuida) con todo el amor que nos puede dar.
Con mucho amor, para mi hijo Álvaro.

10 COMMENTS
Gi
3 años agoWow! Que escrito mas real. Definitivamente tener vida dentro de mi fue magnífico. Esa etapa es hermosa, cuando comencé a sentir sus pataditas ni te cuento. Que rico!!!!! Al final del embarazo sentí también ansiedad. Loca loca por tenerlo en mis brazos.
Denise
3 años agoAhhhh que belleza! Se me aguaron los ojos. Un embarazo definitivamente es un momento mágico. Mientras leía me recordaba de los momentos de mi última barriga. Tal cual pensaba en todo eso
Carla Sánchez
3 años agoEstos post que llenan el alma, te agradezco de corazón compartirlo. Lo amé ❤️
Luisana Lopezrojas
3 años agoQue belleza! Le diré a mis mamás embarazadas que pasen por aquí a leer esa carta!
Carla Kratochvill
3 años agoLloré de sentir cada uno de estos versos míos, porque esto es lo que uno siente cuando viene un hijo
Linda Del Grego
3 años agoQue delicia todo lo que imaginamos que puede pasar y lo maravilloso que es cuando está en tus manos. Bellísimo
Lina Ocampo
3 años agoQue hermosura, eso sentimos todas con cada bebe que llevamos en nuestro vientre ♥️ Con los tres a sido igual de emocionante y un sentimiento que no tiene explicación ♥️
Ivone Castellanos
3 años agoQue maravilloso leerte, es algo mágico ser mamá y esa espera con tantos cambios en tu cuerpo. es una bendición Poder dar vida
Nadezda
3 años agoQue lindo este post, es hermoso vivir el proceso tenerlos en la pancita y luego verlos. Es el amor más grande del mundo
María
3 años ago¡Qué hermosura! Se me erizaron los pelos… qué exactitud en cada palabra… qué inmenso este amor